miércoles, 31 de octubre de 2012

Bizcocho de dos chocolates (hipercalórico!!!)




Está demostrado que a veces los postres van por su cuenta. Da igual que sigas todos los pasos, añadas los ingredientes medidos hasta el último miligramo... ellos siempre tendrán su última palabra. Ya ocurrió con la anterior receta, y por lo que veo se está convirtiendo en tendencia entre nuestros queridos "bizcochos". Y es que juro que no hacemos nada raro, en serio, pero a veces hay factores con los que no cuentas; en el caso de la coca de caquis era la fructosa, y en esta ocasión ha sido el chocolate blanco. Sí, el de Nestlé, de repostería, para derretir. No sabemos cómo ni por qué, pero ha convertido un bizcocho en brownie, así porque sí. 


¿Y por qué sabemos que fue el chocolate blanco? Pues porque el día anterior, para el cumple de mi sobrino, mi hermana utilizó exactamente los mismo ingredientes para hacer un bizcocho de chocolate, que quedó esponjoso, con volumen... mmm... estaba riquísimo (lo sé, no tengo foto, es que no duró mucho... no me matéis!!). ¿Dónde radicaba la diferencia? Que no llevaba chocolate blanco, sólo habíamos utilizado la tableta de chocolate negro, y salió riquísimo. 
Y claro, teniendo en cuenta que la coca de caquis no iba a llegar para la sobremesa del domingo (ya que nuestra familia, además de extensa, es de buen comer, por así decirlo), decidimos añadir una versión más ampliada de nuestro exitoso bizcocho de chocolate, pero esta vez utilizando chocolate blanco, que la verdad no habíamos probado antes.



Y así quedó. Apariencia de brownie, ¿verdad? Bueeeno, el caso es que estaba riquísimo de sabor, pero rico de verdad.
E hipercalórico, también.

En fin... mejor me voy a callar, y os dejo la receta. Comprobadlo vosotros :-)

- 125 gr de chocolate negro para derretir (nosotras utilizamos el de marca Nestlé)
- 125 gr de chocolate blanco para derretir (lo mismo de antes, marca Nestlé)
- 150 gr de mantequilla
- 5 huevos (claras y yemas por separado)
- 40 gr de Maizena
- 16 gr de levadura (un sobre de Royal de toda la vida)



 Primero, dividimos la mantequilla a partes iguales y la repartimos en dos cuencos (es decir, 75 gr aproximadamente en cada uno). Dividimos en onzas el chocolate, y echamos el blanco en un cuenco y el negro en el otro. Derretimos al baño maría (nosotras lo hicimos  en dos cazuelas dentro de otras, vamos, al método más rudimentario, pero efectivo ehh!!)




Mientras, batimos las claras a punto de nieve. Cuando estén listas, añadimos la maizena y la levadura.

Esta sería una textura idónea, fijaos en la imagen inferior que es realmente esponjosa.


Es el momento de retomar los fogones. Comprobamos el estado del chocolate, siempre procurando mover la mezcla para que no se queme ni se formen grumos. Cuando consideremos que está completamente derretido, removemos bien para que se integre del todo el chocolate con la mantequilla.



 Una vez hecho todo esto, añadimos el chocolate a la mezcla de las claras con la maizena y la levadura, y mezclamos bien (sin darle damasiada caña ehh!!). Por último, añadimos las yemas de una a una, que iremos integrando poco a poco a nuestra mezcla.

¡Y esto es todo! Vale, si, un poco desastre si que fue, pero ¡ojo! el sabor es muy bueno; al fin y al cabo, no podríamos esperar menos del chocolate, mmm...

Os animo a que lo practiquéis en casa, y si conseguís que os suba, por dios, ¡hacédnoslo saber! Y ya sabéis, si no queréis arriesgar, modificad sólo el apartado del chocolate: en lugar de añadir 250 gr de un tipo y 250 gr de otro, id a lo seguro: 500 gr de chocolate negro, y queda perfecto. Esponjoso, suave, dulce... ai, que ya tengo hambre otra vez...

En fin, nos vemos muy pronto... ¡¡¡que ya es Halloween!!!
¡Un biquiño!



jueves, 25 de octubre de 2012

Coca de caquis (crónica de un bizcocho rebelde)


Sí, como lo oís, puede que me encuentre ante el primer bizcocho rebelde de la historia. Se suponía que esta receta sería la de un bizcocho normal, esponjoso, con cuerpo, apto para tomar solo o empapado en café; vamos, un bizcocho de los de toda la vida. Peeero no, porque este bizcocho decidió poner sus propias normas y se declaró en huelga (el pan de cada día, vamos), y decidió no subir, por lo que me obliga a renombrarlo como una coca de caquis, más que como un bizcocho. 



Supongo que todos conoceréis lo que es una coca, pero por si acaso os lo resumo rápidamente: la "coca" típica es de origen catalán, y puede referirse tanto a variantes dulces como saladas. Su característica esencial son sus dimensiones, ya que suele ser muy plana; de hecho, según cuentan, su origen viene del aprovechamiento que hacían las amas de casa de la masa del pan que había sobrado porque no habría aumentado de volumen. Así, en vez de tirarla, la volvían a amasar, la endulzaban y servían de postre.



Hasta aquí todo bien, pero es que.... ¡¡es que no tenía que ser una coca, tenía que ser un bizcocho!! Y es que la razón de todo este desengaño político en el mundo bizcochil tiene un nombre: la fructosa. Sí, ese sustituto del azúcar procedente de las frutas y la miel. Y es que no he mencionado hasta ahora que en mi familia hay muchas personas con diabetes, por lo que nos vemos obligadas a modificar en numerosísimas ocasiones nuestras recetas originales para adaptarlas y hacer opciones sin azúcar.

Bueno, que me estoy enrollando mucho, ahí os va la receta... ¡Coca de caquis apta para dabéticos!

Ingredientes:
- 50 gr de fructosa
- 100 gr de almendra en polvo (nosotros mezclamos almendra en polvo y almendra picada, para darle más juego al asunto)
- 50 gr de harina
- 50 gr de mantequilla
- 16 gr de levadura (1 sobre de levadura Royal de los de toda la vida, vamos)
- 4 claras de huevo
- 1 caqui

Primero, montamos las claras hasta que estén a punto de nieve. 

Aunque en la foto podéis ver que lo hemos batido con un robot de cocina, sirven las batidoras normales de toda la vida
Las claras listas (a puntito de nieve!!)

 Cuando estén casi listas, añadimos, sin dejar de batir, la fructosa, la almendra, la harina y la levadura. Batimos hasta que la mezcla esté bien incorporada.



Derretimos la mantequilla en el microondas, y una vez lista la añadimos a la mezcla. 


Picamos el caqui en pequeños pedacitos, que queden todo lo planos posibles. Preparamos un molde colocando en la base papel vegetal para hornear. Encima, colocamos el caqui troceado y repartimos los pedazos por toda la base. Mientras, precalentamos el horno a 200º.


Añadimos la mezcla sobre la base de caquis, y la extendemos con la ayuda de una espátula, hasta que quede bien nivelada (más o menos, no pasa nada si no queda del todo igual por toda la superficie). Mientras, precalentamos el horno a 200º.




Hasta que os quede algo así:



Lo metéis en el horno, y lo dejáis unos 30 minutos, aproximadamente (es orientativo, depende del horno). Procurar hornearlo sobre una rejilla, para que fluya el calor de manera más homogénea.

Y....

... ¡¡¡¡¡¡tachááááán!!!!!!


Mmmm... ¡riquísimo! Cortadlo en pequeñas raciones, nosotros hicimos sobre 25 cuadraditos. Son ideales para tomar en la sobremesa.
¡Ah! Y por si alguien está interesado, son unas 60 kcal por ración, aproximadamente.


Esperamos que os animéis a probarla en casa, y para quienes no puedan tomar azúcar, es ideal. Un saludo, nos vemos próximamente con una receta más achocolatada, no digo más, jijijiji. Un biquiño!

sábado, 20 de octubre de 2012

La buena comida...

...entra antes por los sentidos que por la barriga.

(O eso dicen...)

El caso es que hoy inauguro por fin el blog, y vale, si, aunque no todas las recetas que subiremos (y es que somos dos las que nos ponemos con las manos en la masa) serán del gusto de todo el mundo, espero que consigamos un ambicioso objetivo: abrir el hambre a todos los que nos visiten, con nuestras ricas creaciones.



Esta idea surgió a raíz de mi casi obsesivo afán por hacer un recetario decente, ya que después de intentarlo comprando mil millones de bonitas libretas, cuadernillos (que hasta decoré con dibujitos, y todo!), y mi maravilloso y fantástico Recetario Moleskine (os lo recomiendo encarecidamente), dio unos resultados bastante relativos (vamos, que siempre lo dejaba para más tarde, y luego, en fin, mi memoria... ya sabéis...).

Bueno, lo importante es que empezamos (mi hermanísima y yo) este blog con muuuucha ilusión y sobre todo con ganas de probar nuevas recetas e ideas. Aunque, como veréis, estará bastante enfocado a la repostería, que ADORAMOS, de vez en cuando no será raro que suba (en este caso yo misma, que soy la estudiante de turno), alguna que otra idea enfocada a la cocina sencilla y como no, a la alimentación saludable.


Mmmm... ¿me olvido de algo? Ah, si! Que nos encanta la cocina ecológica, por lo que estará bastante presente en nuestro recetario salado; y bueno, que teniendo en cuenta la cantidad de diabéticos que hay en nuestra familia, veréis que muuuchos postres son perfectamente aptos para aquellas personas que no toleren el azúcar.



Y otra cosilla más, mil millones de gracias a Antía de http://cupcakeobsesion.blogspot.com.es/, por aconsejarme en el montaje del blog y por animarme a hacerlo (además es una de mis profes reposteras en http://rosebakeryscq.blogspot.com.es/)



De momento no tengo más que añadir, os dejo con la intriga de nuestra primera receta, será algo dulce, ya veréis.



Un saludo, y que aproveche!!